Una forma diferente y atractiva de presentar las patatas
El confitado de un alimento, consiste en cubrir éste con aceite o alguna otra grasa, y cocinarlo a una temperatura baja, que va a hacer que consigamos una textura y sabor estupendos.
Si te pasa como a mí, y tienes comensales que no pueden prescindir de unas patatas como guarnición, sea la ocasión que sea, prueba a hacerlas de esta manera, y conseguirás unos platos más vistosos, y con sabores diferentes; ya que puedes aromatizar el aceite a tu gusto con hierbas, o alguna especia: romero, tomillo, ajo, unos granos de pimienta....
Puedes ayudarte de un sacabocados, y darles forma redonda.., hacer cilindros con un descorazonador, vaciar el interior de unos cubos de patata y rellenarlos con una rica salsa...
Ingredientes:
- Patatas nuevas
- Aceite de oliva virgen extra
- Pimentón picante, dulce, o mezcla de ambos
- Sal
Preparación:
Corta las patatas en gajos, una vez bien lavadas:
Cuando veas que empiezan a salir burbujitas, introduce las patatas, y deja cocinar a fuego muy lento, ( que no llegue a ebullición ), hasta que veas que al introducir un palillo, y entra y sale con facilidad. El tiempo va a depender del grosor o forma que hayas elegido para tus patatas, pudiendo rondar los 20-40 mts.
En el caso de las patatas al pimentón, espolvorea con éste, una vez las hayas pasado a la fuente donde vayas a servir.
Un clásico de las patatas confitadas, son las patatas "puente nuevo": se pelan, se cortan en tiras del tamaño de un dedo, ... y se presentan de esta manera:
Hazlas protagonistas absolutas del plato añadiéndoles una salsa de tu gusto: brava, de queso, alioli... ; o acompaña una buena carne con ellas...
Con un rico cordero asado y escarola a la cordobesa |